"Toda Escuela de Diseño debería tener una banda o un taller de música."
Esta frase era publicada el año pasado en la página web de la Esdir, acompañada de una interesante propuesta en la que planteaba la creación de un espacio musical dentro de la Escuela.
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La intención de la asignatura y de este blog es repasar diversos temas de una manera objetiva y coherente. Hace unos días se nos pedía cierto orden en nuestro blog, y bien es cierto que no es exactamente lo que predomina en el mío, pero puedo encontrar una estrecha relación que ha sido mencionada en clase varias veces ya. Las entradas sobre música en mi blog son predominantes, pero no hay que olvidar que está siendo escrito para una asignatura de carrera de diseño. Hablo entonces de la relación entre diseño y música.
Volviendo al principio, hablaba de la propuesta de la escuela la cual mencionaba el blog del profesor de esta asignatura donde decía:
"Es imprescindible beber en cada tiempo de las fuentes profundas de la poesía o de la música, siendo esta última el vehículo más común y popular para acceder a la primera. Sin poesía no hay buen diseño. Y sin música, nos empieza a ser difícil acceder ya a la poesía."1
La propuesta se llevo a cabo con el apoyo y los medios justos, con mucha falta de compromiso y pocas ganas de desarrollarlo con el tiempo.
"Aprovecha esta oportunidad para dar la nota. Apuntaros antes del viernes 16 de enero. Va a ser sonado."
Tal vez se pecó de cierta hipocresía a la hora de pretender conseguir un fin sin conocer qué ocurría en su interior.
Se pretendía una conexión entre distintas especialidades, y más importante aún, entre profesores y alumnos, pero todo quedó en algo utópico.
Las referencias estaban claras, se hablaba de la banda de jazz de la Bauhaus, pero dudo que ésta diese su mejor fruto en tres meses. Si lo que se pretende es ser una escuela con movimiento, creativa que no tenga nada que envidiar al resto, habrá que pensar en el cómo, y tener paciencia.
Añado por último las fotos de un desfile tras el cual, se ofreció a los asistentes un vino en el hall. Hay fotos del público que asistió, tanto sentado como esperando a entrar, de la directora y profesores de la escuela, del backstage y por supuesto del desfile. Pero ni rastro de la banda que aún siendo vacaciones y viviendo fuera tocó ese día en el hall como estaba previsto, siendo ya los únicos con interés e ilusión en realizar el proyecto propuesto meses atrás.
Hago esta entrada más que como crítica, como llamada de atención. Creo que la idea era buena pero no su compromiso y apoyo. Si la escuela de la Bauhaus se planteó tener una banda por algo sería. Lo que decía, relación entre diseño y música, imprescindible. Sé que hablaba antes de objetividad, y también sé que termino esta entrada llevándolo a lo subjetivo, pero lo necesitaba.
1 Pequeñas lecciones de diseño 120.MÚSICA Y DISEÑO
